Yo y mis otros yo

A lo largo de nuestra vida vamos cambiando. Sin dudas, cualquiera de nosotros puede decir que no es la misma persona que era a los 20, los 30 o los 40. ¿Alguna vez te has detenido a pensar en esos momentos clave que te transformaron?

Muchas veces, esos cambios se dan porque uno así lo quiere, y otras, por diversas cuestiones de la vida que nos hacen cambiar para adaptarnos.

En mi caso te puedo contar dos hitos muy marcados que me convirtieron en una persona diferente. 

Voy a empezar con el hito que fue planificado: Vendí todas mis cosas y me fui a vivir a otro continente con solo dos valijas. Necesitaba hacer un cambio drástico en mi vida porque no solo esa vida me estaba enfermando, sino que el ambiente en el que estaba no me ayudaba a ir hacia donde mi cuerpo sabía que tenía que ir (yo en ese momento tampoco era consciente de lo que quería, solo que necesitaba un cambio). Aclaro que por ambiente me refiero a todo lo que rodea a una persona: la ciudad en la que vive, las rutinas, las relaciones, la vida social que tiene con las personas que la rodean, etc.

Cuando llegué a Valencia, todo empezó a caer en su lugar: nuevas amistades, nuevas actividades, una vida social totalmente diferente. De repente todo empezó a fluir y se fue de mi vida esa pesadez que tenía que me hacía constantemente querer estar alejada de mi realidad. Y así es como se creó una versión de mi identidad.

Ahora te voy a contar la otra experiencia que moldea mi identidad día a día: la maternidad. Si bien la elección de ser madre fue elegida y planificada, lo que viene después del nacimiento del bebe es incertidumbre pura. Por más que tenía un plan, el bebe va a hacer  lo que quiere y como madre me voy adaptando lo más rápido que puedo para acompañarlo. Esto me lleva a adaptar mi plan todos los días, ir y venir con mis ideas y mucha flexibilidad.

Estos son solo dos ejemplos. Al momento de escribir esto tengo 37 años con lo cual te podrás imaginar que hitos que modificaron mi identidad hay muchísimos. Seguramente vos también tengas a montones.

Creo fervientemente que no importa cuántas veces queramos cambiar o “nos toque” cambiar, con un plan y dando pasos a la acción constantemente vamos a llegar al objetivo deseado con un rol activo: somos creadores de la vida que queremos tener.

Si estás pensando que eso es solo posible para personas que tienen tal o cual condición, ya te digo que no. Ese es tu cerebro que te quiere mantener en la zona de confort. 

Todos podemos moldear nuestra vida como queremos, solo necesitamos un plan y a veces un poco de ayuda para armarlo y llevarlo a cabo. Si ese es tu caso, acá estoy para ayudarte para que crees tu nueva mejor versión hasta ahora. Entiendo en carne propia lo que significa querer cambiar y tener que cambiar y cuento con las herramientas para ayudarte con las dos opciones. No esperes más para empezar a construir la vida que querés.

Hasta la próxima 🙂

Jimena Gonzalez
Health Coach

Deja un comentario